PSICOLOGÍA Y
rendimiento:

combinación ganadora en
el deporte y en la vida

La confianza, la motivación, el control mental y la concentración te permiten

lograr la mejor versión de ti mismo

EL DEPORTE MEJORA LA VIDA DE LAS PERSONAS
Es rotundo, pero cierto
En la infancia, integrar los valores del
deporte colabora muy positivamente en la educación y formación de los más pequeños
Ya en la vida adulta, la práctica deportiva se rodea de valores de enorme potencial. Pero, además, reporta beneficios físicos y psíquicos
El entrenamiento
también
Ligado tradicionalmente al entrenamiento físico, el deporte ha cambiado a lo largo del tiempo. Hoy se asume con naturalidad que, en el deporte, como en la vida, los factores psicológicos juegan un papel fundamental. Cada vez más, deportistas de todos los niveles son conscientes de que la psicología deportiva forma parte de su entrenamiento al mismo nivel que otras cuestiones como el trabajo de fuerza, la alimentación o el descanso.
El entrenamiento mental tiene como objetivo potenciar las habilidades psicológicas de cada persona. De este modo, se minimizan las carencias y se influye directamente en el rendimiento del deportista.
Controlando las emociones, manejando el intelecto y trabajando para conseguir
optimizar el desarrollo tanto a nivel personal como deportivo.
¿Qué trabaja
un psicólogo
deportivo?
Lejos quedan los tiempos en los que se les relacionaba únicamente con el tratamiento de patologías. En la actualidad trabaja el componente emocional e intelectual a través de aspectos como:
LA TOMA DE DECISIONES
EL CONTROL DE LAS EMOCIONES
EL MANEJO DEL ESTRÉS Y LA ANSIEDAD
LA CONCENTRACIÓN
EL REFUERZO DE LA AUTOESTIMA
LA AGILIDAD MENTAL
¿Qué factores
mejoran el rendimiento
deportivo?
CONCENTRACIÓN
Es uno de los más destacados, pues afecta de forma positiva al rendimiento y a los resultados. Además, una alta capacidad de concentración va ligada a la reducción de los errores.
Un deportista debe aprender a concentrarse en los estímulos que influyan positivamente en la competición y a desconectarse de lo que pueda distraerle. Todas las acciones tendrán una mejor ejecución si se potencia la concentración del individuo. Visualizar el objetivo y el camino a seguir para lograrlo es una técnica sencilla
y efectiva.
AUTOCONFIANZA
La confianza en las habilidades personales para lograr alcanzar el éxito es necesaria para conseguirlo. Creer en tus posibilidades es primordial.
La autoconfianza se consigue de forma progresiva. Es importante que el deportista valore cada uno de sus avances y mejoras desligándolo de los resultados. Es decir, se recomienda centrarse en el rendimiento, pues si no el riesgo de sentirse fracasado se multiplica.
MOTIVACIÓN
La pasión es la fuerza que mueve a los deportistas a continuar. La práctica deportiva es una montaña rusa: victorias, derrotas, picos de forma, días en los que el cuerpo no responde,… La motivación es necesaria para seguir adelante ante cualquier obstáculo o dificultad.
El rendimiento no se entiende sin la
motivación.
A principio de temporada se
deben establecer las grandes metas, pero
tan importante como eso es marcarse
pequeños objetivos. Así, cada paso que se logre
supondrá una inyección extra de motivación
sin necesidad de jugárselo todo a una carta
con el gran objetivo final, ya que esto puede
abocar a la sensación de fracaso a la pérdida de
confianza. Además, cada persona debe buscar
la estrategia para mantener la motivación a lo
largo del tiempo.
CONTROL EMOCIONAL
A veces, la única diferencia entre el éxito y el fracaso es el control emocional. Controlar los pensamientos recurrentes, las dudas, los miedos… es un ejercicio de gran importancia tanto en los días previos como en la propia competición. De lo contrario, el rendimiento se ve resentido llegando incluso al bloqueo.
Saber aplicar técnicas para la gestión emocional es un aprendizaje tan válido en el deporte como en otras áreas de la vida diaria. El manejo del estrés y de la ansiedad permite actuar con tranquilidad y sacar al terreno de juego la mejor versión de cada persona.
El control de uno mismo permite mostrar el máximo potencial en el momento adecuado
MÁS DEPORTE,
más rendimiento
laboral y personal
Fuera del ámbito estrictamente deportivo, se ha demostrado que las personas que practican deporte de forma habitual incrementan su rendimiento en todos los ámbitos de su vida.
¿Cómo se refleja
en la vida
personal?
Mejora la salud
Aumenta la calidad de vida
Mejora la memoria
Activa el metabolismo y la circulación
Favorece la relajación y el descanso
¿Cómo se refleja
en el ámbito
laboral?
Reduce el absentismo laboral
Aumenta exponencialmente el rendimiento laboral
Ayuda a controlar el estrés
Potencia el trabajo en equipo
Mejora la capacidad de concentración
Topping Serrano