Recta final de un 2020 que no ha
sido como esperábamos. Todo lo
sucedido estaba fuera de guion.

Nos hemos enfrentado a una nueva normalidad en la que nos está resultando muy complicado o casi imposible viajar como más nos gusta. Pero siempre hay que buscar alternativas...

Disfrutar de un apetitoso manjar, saborear cada momento y no poner barreras a nuestra mente es fundamental para asegurar una buena salud mental. Como dice la cita latina:

Comenzamos nuestro viaje en Francia, con un film del año 2000 protagonizado por Juliette Binoche y Johnny Deppque tiene al chocolate como hilo conductor de un relato
que nos traslada hasta Vianne, un pueblecito medieval francés con mucho encanto y que apenas ha cambiado.

Un chocolate para cada persona.
¿Se puede leer el alma de las personas a través de este ancestral producto? Según los Mayas, sí es posible. Cierto o no, este demandado manjar causará gran revuelo entre los habitantes del pueblo durante el año 1959.

Sin salir del país galo, hacemos parada en la hermosa París de
la mano de Remy, un ratoncito
que nos cautivó allá por 2007 con sus dotes para la cocina. Si algo nos ha enseñado esta película
es a perseguir los sueños, por complicados que parezcan y a que ratatouille es un plato francés a base de verduras estofadas.

La historia sucede en la cocina
de un restaurante de la capital,
pero también nos descubre ese
París recóndito y humilde donde
las buhardillas iluminan la ciudad
del amor; un skyline que muestra
su belleza nocturna, edificios emblemáticos y las orillas del Sena.

Meryl Streep y Amy Adams son las protagonistas de una historia real de superación personal a través de la cocina. 524 recetas son el eje central de esta divertida historia culinaria donde Julie (Amy Adams), frustrada con su vida profesional, decide dedicar un año a elaborar todas las recetas de un libro de cocina de la célebre cocinera Julia Child, interpretada por Meryl Streep.

Y sin salir del continente americano, la costa de California nos brinda, nunca mejor dicho, una película que habla de vino, bodas y viajes.

Una road movie para deleitarse con paisajes campestres y que nos recuerda a esos viajes en coche propios de la juventud. Dos amigos, mano a mano, recorren la costa californiana para buscar el mejor vino para la boda de uno de ellos. La excusa perfecta para celebrar la despedida de soltero.

Viajamos ahora hasta el continente asiático para sumergirnos en Taipéi. Esta película, dirigida por Ang Lee, narra la historia de un chef viudo con tres hijas muy rebeldes. Un tiempo importante que trata este film es la importancia de la unión familiar que generan sus cenas de los domingos, una ceremonia indefectible donde pone en práctica su destreza para preparar platos, con la gastronomía china como nexo.

Un momento para estar juntos, compartir experiencias y disfrutar de las relaciones personales. Y qué mejor lugar para reunirse que alrededor de una mesa.

Regresamos a Europa. La cocina francesa y la India se funden en una guerra gastronómica en medio de un pequeño pueblo de los Alpes franceses.

Helen Mirrel, una reputada chef con una estrella Michelin, entra en cólera tras la apertura, a tan solo diez metros de su restaurante, de su competencia en versión india. Todo sucede en Saint Antonin Noble Val, un pintoresco pueblo medieval donde se encuentran las casas más antiguas de Francia.

Ponemos punto final a la cartelera con una propuesta con la que nos adentramos en los viñedos de la Provenza francesa de la mano de Russel Crowe y Marion Cotillard como protagonistas de una película que enamora por sus paisajes. El rodaje se desarrolló, casi por completo, en el macizo de Luberon, concretamente en Bonnieux, un pueblecito sobre la ladera de una montaña con su iglesia, su castillo y donde a más de uno le gustaría perderse.

Impresionantes las imágenes de los viñedos y campos de la Provenza y
el gusto por la gastronomía y el vino de la zona. Una buena opción para evadirse y decidir sobre las cosas que verdaderamente importan en la vida, ¿el dinero o la felicidad?.